¡No acierta plenamente quien por insuficiente desarrollo del conjunto de su ser -órgano mental, emocional y corpóreo-, practica una religión o un esoterismo de imágenes, beneficios corporales o materiales o poderes que les den algún provecho en esta vida!
¡No acierta plenamente quien pretende la salvación en un más allá por su entrada en paraísos compuestos de imágenes o sensaciones como los que aquí percibimos por los sentidos corporales; paraísos que no pueden ser sino tremendamente relativos y temporalmente limitados!