Cuando se intuye el camino, se ve al mismo tiempo, de alguna manera, lo que es el único y recto camino. El Camino se autentifica y da testimonio de sí mismo. Igual que existe el Universo Divino -«El Reino de Dios, dentro de vosotros está»- y no tenemos que construirlo sino sólo acercarnos a él, también existe el Camino, independientemente de nosotros, sólo que cada uno nos acercamos a él de diferentes modos.
